¿Qué hace que Puerto Vallarta sea tan especial? En realidad, es una impresionante combinación de muchas cosas: su pintoresca ubicación, arropada por las montañas donde frondosas selvas, ríos y cascadas se encuentran con las profundas, ricas y azules aguas de la enorme Bahía de Banderas, sus playas y el Océano Pacífico; lugares de interés y actividades, como el famoso "Malecón", con espectaculares vistas al océano, esculturas y arte huichol local; además de la Parroquia neoclásica de Nuestra Señora de Guadalupe, que puede verse desde las calles empedradas de todo el centro de la ciudad; y otros lugares como el Jardín Botánico, Los Arcos y una multitud de actividades acuáticas.
O tal vez sea la historia romántica, como el rodaje de "La noche de la iguana" en 1963, rodada en Puerto Vallarta y sus alrededores y en la que participaron Richard Burton, Ava Gardner, Deborah Kerr, Tennessee Williams y Elizabeth Taylor. Los tabloides se hicieron eco de las travesuras de Burton y Taylor fuera de la pantalla y, una vez terminado el rodaje, ambos compraron una casa en Puerto Vallarta y visitaron la ciudad con regularidad. El director John Huston construyó una casa en la zona y sus hijos, Angélica y Danny, son fundadores y promotores del Festival de Cine de Puerto Vallarta. La película "Depredador", protagonizada por Arnold Schwarzenegger, también se rodó aquí en 1987, con numerosas escenas selváticas en las colinas situadas detrás de la playa de Mismaloya.
Pero lo que diferencia a Puerto Vallarta de la mayoría de los centros turísticos es el hecho de que es y ha sido durante siglos una auténtica ciudad de trabajo y un puerto activo. Los misioneros españoles documentaron escaramuzas entre los conquistadores españoles y los pueblos locales que se remontan a 1524, cuando se produjo una gran batalla entre Hernán Cortés y entre 10.000 y 20.000 guerreros indígenas que concluyó con el control de gran parte de la región por parte de los españoles y Cortés. La zona también aparece en mapas y diarios de navegación como bahía de refugio para los galeones españoles durante su comercio con Filipinas y otros destinos del Pacífico, así como para otros marinos costeros. También figura en algunos relatos de operaciones de piratería y contrabando, que evitaban el pago de impuestos en el cercano puerto oficial de San Blas.
Un hermoso telón de fondo con cielos y mares azules, una rica historia, maravillosos restaurantes y entretenimiento nocturno, un sinfín de actividades; además de un nivel de autenticidad, encanto y acogedor espíritu local que sitúan a Puerto Vallarta por encima del resto. El tiempo es extremadamente soleado y seco de noviembre a mayo, mientras que la temporada de lluvias, con temperaturas más altas y chubascos por la tarde, se extiende de junio a octubre. Abundan los alojamientos en las playas y cerca de los lugares de interés, así como las villas en las laderas de las montañas, lo que convierte a "Vallarta" en el paraíso óptimo para vivir y aprender español.
Este viaje fue fuera de este mundo. Puerto Vallarta es precioso y mi profesor de idiomas me ayudó mucho a aprender español rápidamente.
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